Localización: Artajona (Navarra)
Actuación: intervención en El Cerco
Intervención
El recinto defensivo de Artajona tiene su origen a finales del siglo XI, a raíz de la donación de su iglesia a Saint-Sernín de Toulouse, y comienza su declive a partir del siglo XVI, momento en el que deja de estar bajo la tutela de los canónigos franceses. Bien por la rapiña de los materiales constructivos para un nuevo uso, bien por la incapacidad de proteger un patrimonio tan extenso, el hecho es que hasta la presente actuación se desconocían con exactitud datos tan básicos como el perímetro del conjunto. Por eso, ha sido necesaria la realización de trabajos arqueológicos que indaguen en una parte de la historia a la que los documentos no llegan.
Si un análisis formal de la arquitectura y las pinturas de la iglesia de San Saturnino permitían corroborar la impronta francesa, del mismo modo aquí es preciso destacar la notable influencia francesa en el conjunto defensivo que se hace más evidente en su “donjón”; una torre cilíndrica de casi once metros de diámetro al exterior y unos veinte o treinta metros de altura. Éste, ubicado a su vez en el lugar más elevado, desempeñaba las funciones de Torre del Homenaje, de vigilancia del territorio y de refugio último en caso de ataque. Curiosamente fue readaptado como nevera en el siglo XVI. La arqueología también ha permitido el descubrimiento de elementos tan importantes como una bestorre (torre del recinto amurallado abierta hacia el interior) y la puerta colindante, o un importante aljibe de agua, localizado más allá del recinto y cuya naturaleza sigue rodeada de muchas incógnitas.
Resultaba pues imprescindible una intervención arqueológica de todo el conjunto para estar en condiciones de acometer otras tareas de adecuación o recuperación de uno de los lugares cuyo patrimonio cultural ofrece un mayor potencial turístico, aún por desarrollar.