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Fundación para la conservación del Patrimonio Histórico de Navarra
Santa Criz

Las obras de consolidación de la ciudad romana de Santa Criz, en Eslava, finalizarán en otoño

A finales de año se procederá a la adecuación de recorridos, instalación de la información y redacción de la memoria.

Para el próximo otoño está prevista la finalización de las obras de consolidación de la ciudad romana de Santa Criz, en Eslava, cuyo proyecto, que está siendo ejecutado por el Ayuntamiento de la localidad, ha sido informado favorablemente por la Sección de Arqueología del Gobierno de Navarra.

Este proyecto deberá incluir algunas medidas necesarias para la correcta conservación de las estructuras, como el saneamiento del muro septentrional, la colocación de contenciones en determinados lugares, la regularización de taludes, o el sellado y reconstrucción de algunas estructuras. La última fase, prevista para finales de año o comienzos de 2016, corresponderá a la musealización, con adecuación de recorridos, instalación de la información y exhibición de las piezas, y a la redacción de la memoria de los trabajos efectuados.

La Dirección General de Cultura insta al Ayuntamiento de Eslava a presentar un inventario de las piezas arquitectónicas acopiadas, y, a la vista de esta información, se determinarán las medidas a tomar para la conservación de estos elementos.

Un foro de casi 300 m2

La intervención realizada entre los meses de junio y octubre de 2014 en la ciudad romana de Santa Criz abarcó una superficie de 1.245 metros cuadrados, y en ella se despejó en su integridad el espacio de la plaza pública y se excavaron los pórticos este, oeste y norte.

Los datos más importantes aportados por la excavación fueron los siguientes: se pudo identificar el cierre por el sur y oeste del espacio público, lo cual determina una superficie abierta porticada de 288 metros cuadrados; los muros de cierre sur y oeste se hallaban muy desmontados y denotaban, especialmente el sur, numerosas reparaciones; se identificaron los accesos a la plaza, dos secundarios en los ángulos sureste y noroeste con grada de sillería y los dos principales, situados en el centro de los lados sur y oeste; en el lado oeste de la plaza se ha reconocido un pequeño sacellum o espacio de culto público, probablemente ligado al culto imperial, del cual restan los dos pedestales para sendas estatuas y un “betilo”, a cuyo pie se reconocieron varios depósitos incinerados; se confirmaron los problemas estructurales sufridos por el edificio, que llevaron a una pronta consolidación de la construcción, recurriendo al cegado de los pórticos, apuntalamiento del criptopórtico norte a instalación de un sistema de contención del terreno en la zona abierta porticada, y en el lado este se reconocieron los restos de una calle y al final de ésta construcción de tipo turriforme.

Los datos aportados por la cultura material apuntan a una cronología julio-claudia (en torno al cambio de era, durante los mandatos de Augusto-Tiberio) para el inicio de la construcción, si bien hay también datos que demuestran el inicio de la ocupación en época tardorrepublicana (comienzos del siglo I a.C.). Según señala la Sección de Arqueología, solo se ha intervenido en estos niveles mediante sondeos por no añadir confusión a las estructuras y evitar su descalce.

Como en anteriores campañas, ha sido recurrente el hallazgo de piezas de arquitectura monumental, si bien en esta ocasión no se ha localizado ninguna decorada ni ningún resto escultórico de consideración. Estas piezas se han ido conservando en dos acopios.

Se ha restaurado el material mueble principal (numismática, fragmentos de una escultura en bronce, cerámica e industria ósea) y se ha trabajado sobre un gran volumen de pintura mural hallada como relleno de las estructuras de contención de la plaza. El material se encuentra depositado en los Fondos de Arqueología del Gobierno de Navarra.

El Gobierno de Navarra realizó en 2014 el primer pago previsto en el convenio, por importe de 175.813 euros, destinado a la adquisición de los terrenos por parte del Ayuntamiento y a la realización de la excavación arqueológica. El segundo pago, para la consolidación de las ruinas, ha sido de 106.689 euros.